Así como en México desaparecieron 43, Argentina desapareció a un ícono que llegó hasta la ONU.
¿Dónde está Santiago Maldonado?
Es la pregunta que tiene en vilo a muchos en Argentina.
Lo buscan desde organismos de derechos humanos hasta la Organización de Naciones Unidas (ONU). Y desde la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner -ahora líder de la oposición- hasta el propio gobierno, que ofreció una recompensa de cerca de US$28.000 para hallarlo.
Todos buscan a Santiago.
¿Quién es? ¿Qué le ocurrió?
Se trata de un artesano de 28 años oriundo de la provincia de Buenos Aires que se mudó hace unos meses a la patagónica ciudad de El Bolsón, cerca de Bariloche, en la provincia de Río Negro.
El lugar fue famoso en el pasado por su comunidad hippie y hoy atrae a personas con estilos de vida alternativos.
Protesta mapuche
Según sus conocidos, Santiago es amante de la naturaleza y se dedicaba a realizar tatuajes en una feria artesanal.
También se sabe que apoya el reclamo de los pueblos originarios por sus tierras ancestrales.
Por ello había viajado hasta la cercana localidad de Cushamen, en la vecina provincia de Chubut, donde desde 2015 la comunidad mapuche ocupa terrenos comprados por el empresario italiano Luciano Benetton pero que los mapuches reclaman como propios.
Sergio, hermano de Santiago, aseguró que “no es militante ni activista” sino que simplemente quiso solidarizarse con una protesta de la agrupación Resistencia Ancestral Mapuche que venía cortando intermitentemente la ruta que conecta a la provincia con Chile.
La acción se realizaba para exigir la liberación del líder de la agrupación, Facundo Jonas Huala, quien fue detenido en junio pasado y cuya extradición es reclamada por la justicia chilena.
Pero el 1 de agosto, un día después de la llegada de Santiago, la Gendarmería Nacional desalojó la protesta por orden del juez federal Guido Otranto.
Fue la última vez que se vio a Santiago.
Qué pasó
Los testigos del desalojo aseguran que los efectivos de Gendarmería actuaron con violencia.
“Cuando empezó la represión con balas de plomo y balas de goma todos corrimos y cruzamos a nado el río Chubut”, le dijo al sitio Infobae Soraya Maicoño, de la comunidad mapuche.
“Lo vimos (a Santiago) aferrado a un árbol, sin cruzar el río. Entonces se escuchó: ´Estás detenido´. Después se escuchó: ´Ya está, ya está´, pero no sabemos si eran palabras de Santiago o de los gendarmes”, señaló Maicoño.
“Luego ya no lo vimos más”.
Otros tres testigos citados por el diario La Nación confirmaron el uso de balas 9mm y antitumulto y aseguraron que Santiago había sido rodeado por gendarmes y golpeado.
Luego, habría sido subido a una camioneta.
Sin embargo Gendarmería Nacional niega haber detenido al joven.
El juez Otranto, quien también está a cargo de la investigación por la desaparición de Santiago, asegura que “por ahora no hay elementos” para sostener que fue detenido por Gendarmería.
La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, indicó que ni siquiera se puede confirmar que Santiago estaba en ese lugar “porque todas las personas estaban encapuchadas”.
Politizado
La desaparición de Santiago ocurrió en un momento muy delicado para el país, que el próximo domingo celebrará elecciones legislativas primarias.
Son los primeros comicios que enfrenta el gobierno de Mauricio Macri, que se ha visto debilitado en los últimos dos años, desde que asumió el poder.
El caso de Santiago quedó en el centro de una tormenta política cuando la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), la principal rival del oficialismo en las elecciones, denunció su desaparición en su cuenta de Twitter.
Fernández responsabilizó directamente a Macri por los hechos.
“El gobierno nacional de quien depende Gendarmería, tiene la obligación de informar donde está Santiago y la responsabilidad de su aparición. Santiago debe aparecer. Y debe aparecer con vida”, escribió el domingo.
Un día después, cuando se cumplía una semana de la desaparición, agrupaciones kirchneristas, organizaciones sociales y otros manifestantes se sumaron a una marcha frente al Congreso de la Nación que fue convocada por la familia Maldonado.
Durante la protesta hubo serios incidentes: algunos manifestantes lanzaron bombas molotov contra la policía, golpearon a un camarógrafo y atacaron una unidad móvil de televisión.