Estamos a pocos meses de que inicie el proceso de elecciones 2018 en el que se elegirá al nuevo Presidente de México, y Enrique Peña Nieto ya tiene un regalo para su sucesor: le entregará una economía con la deuda más alta de la historia del país.
Así es, proyecciones de la Secretaría de Hacienda indican que al cierre de 2018 la deuda quedará en 47.3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB). Tan sólo entre 2012 y 2016, la deuda pública creció 13.6 por ciento.
Mariana Campos, coordinadora del Programa de Gasto y Rendición de Cuentas de México Evalúa, consideró que el descontrol fue tal que en 2018 se llegará a pagar el monto máximo histórico de intereses, por 698 mil millones de pesos, equivalente al 2.9 por ciento del PIB.
Mientras tanto, la Secretaría de Hacienda afirma que para el próximo año se estará en una ruta de consolidación fiscal y que el endeudamiento estará controlado. Para 2023 calcula una deuda pública del 45.3 por ciento del PIB.
Una cifra muy reconfortante, ¿no creen?