Una de las reacciones luego del feminicidio de Mara Castilla es la de la suspensión de las actividades de la empresa Cabify en Puebla.
Entre los argumentos se encuentra el de que el chofer e inculpado, Ricardo Alexis N, fue contratado a pesar de contar con antecedentes penales (era huachicolero, la fichita). Sin embargo lo que las autoridades olvidan mencionar (de forma muy conveniente) es que para obtener el trabajo este individuo presentó una carta de no antecedentes penales expedida por el propio estado de Puebla.
Por su parte la empresa de transporte privado envió, a manera de respuesta, una carta con diez puntos que muy bien vale la pena analizar:
1. Cabify respeta las decisiones de la autoridad y el gobierno, pero se encuentra inconforme con la suspensión del permiso para operar en Puebla.
2. La firma cumple con las regulaciones de las autoridades poblanas y su ley.
“Somos una empresa que se ha apegado en su totalidad a la regulación del Estado, sin que tengamos conocimiento de que las demás empresas de la industria cumplan con dicha regulación de igual forma”, aseguró la empresa en un comunicado.
3. Cabify acudirá a la vía legal para responder a la medida del gobierno estatal, y mantendrá su colaboración con las autoridades para mejorar la seguridad de los usuarios de servicios de transporte privado.
“Estamos convencidos de que la solución está en todos, y que solamente podremos lograr un cambio bajo un liderazgo claro y un marco legal en todas las industrias a las que ha alcanzado la inseguridad en nuestro país”, dijo la firma.
4. La tecnología de Cabify fue la que aportó la información indispensable y de valor en la investigación que permitió detener al presunto culpable, hecho que no sería posible con otro tipo de transporte.
“No debemos olvidar que, de acuerdo con la Fiscalía General del Estado de Puebla, el feminicidio de Mara Castilla fue el número 59 en el Estado en lo que va del año”, explicó Cabify.
5. La compañía tiene una estrategia para incrementar los protocolos de seguridad, la cual no se frenará con la decisión del gobierno poblano de revocar el permiso de funcionamiento.
6. Cabify tiene una constancia de no antecedentes penales expedida por la Fiscalía General del Estado de Puebla (Instituto de Ciencias Forenses) el 10 de agosto de 2017 en la ciudad de Puebla de Zaragoza.
7. El conductor proporcionó toda la información y documentación necesaria para dar cumplimiento con lo dispuesto por la Ley del Transporte del Estado de Puebla, de acuerdo con la empresa.
“Como mencionamos anteriormente, destacamos que acreditó no contar con antecedentes penales, en virtud de la carta No. 0901001 / 22765132, de fecha 10 de agosto de 2017, suscrita por la C. Erika Paredes Hernández de la Fiscalía General del Estado de Puebla, Instituto de Ciencias Forenses, con fundamento en el Capítulo VI, Artículo 19, Fracción VI del Reglamento de la Ley Orgánica de la Fiscalía General del Estado de Puebla; en dicha carta se menciona que la C. Teresita Hernández López estuvo a cargo de verificar el Sistema AFIS para validar que Ricardo Alexis a la fecha de expedición de la referida carta no contaba con registro de antecedente penal alguno”, argumentó Cabify.
8. La responsabilidad de mantener un registro de antecedentes no penales de los ciudadanos es de la Fiscalía General del Estado de Puebla, quienes son los encargados de emitir las constancias de no antecedentes, dijo Cabify.
9. La revocación de la licencia de Cabify puede derivar en la pérdida de fuentes de ingresos para cientos de familias poblanas.
10. Al respecto de las declaraciones de Uber, en cuanto a que el conductor fue desactivado de manera permanente de su plataforma en Puebla desde mayo de 2017 por incurrir en comportamientos que iban en contra de sus protocolos de seguridad, la firma no tuvo constancia de la situación. “Estamos convencidos que, de haberse compartido, por lo menos con las autoridades, esta situación podía haberse evitado”, comentó Cabify.
Hay que subrayar el punto número cuatro en el que la firma destaca el hecho de que fue gracias a su tecnología que el presunto culpable fue detenido. A final de cuentas el crimen se podría resolver gracias a la información proporcionada por Cabify.
Por otra parte, si Cabify o Uber no existieran y el tal Ricardo Alexis N fuese taxista, tarde o temprano hubiera ocurrido un acto de violencia similar. Si este individuo pudo superar las barreras de calidad de la empresa fue debido a que el estado de Puebla falló a la hora de otorgar constancias y permisos. Dejó que un criminal obtuviera una “carta de buena conducta”.
¿Tú que piensas?