Dicen que «de lo malo, lo bueno», pero en el estado de Guerrero ya no se sabe, al encontrar militares y policías un campamento de delincuentes de donde rescataron un secuestrado, pero encontraron restos humanos en una hielera y extrajeron 12 cadáveres de fosas clandestinas.
Esto sucedió en una región del estado de Guerrero donde narcotraficantes rivales se han lanzado una ola de extorsiones, secuestros y batallas por el control de la zona.
El descubrimiento se dio gracias a una denuncia de que había cautivos en un campamento rural en un cerro en Zitlala, cerca de la Ciudad de Chilapa, dijo Roberto Álvarez, vocero de seguridad del estado de Guerrero.
Con información de: Pulso SLP